Yo nací en una época equivocada, cada día me convenzo más de eso.
Yo debí nacer en la época en que los amantes se mandaban cartas apasionadas en lugar de un inbox o un tweet. Porque si llegará a cualquier lugar y pidiera una dirección en lugar de un teléfono, seguro me verían raro.
En qué momento las personas dejaron de invitar un café para conquistar tras un monitor, ya no hay espacio para el romanticismo, ya nadie se aprende los poemas de Neruda de memoria, es mejor copiar y pegar. Para qué llevar serenata si puedo mandarte el link de tu canción favorita. Las personas ya no tienen citas en el parque, prefieren verse por Skype. Es más fácil, es cierto, pero es por eso que vale menos la pena.
Los amores de antes, esos de cartas y serenatas y paseos en el parque, esos son los que duran toda la vida. ¿Acaso han escuchado de alguien que haya conocido a otra persona en Facebook y con la cuál haya durado toda la vida? o deja toda la vida ¿Qué haya realmente durado con esa persona? Por que yo no.
Y podrás decirme cursi, pero antes lo que ahora consideras cursi era normal, era lo que todo el mundo hacía para conquistar a alguien. Como tú ahora, con tu Facebook, y tus links de Youtube y tus citas por Skype.
¿Lo ves? Debí nacer en una época diferente.
¿Lo ves? Debí nacer en una época diferente.
